Un cargamento de armas y municiones fue confiscado ayer en el puerto de Haina Oriental, donde fueron detenidas dos personas, apenas una semana después de que las autoridades de Haití decomisaron más de un centenar y medio de fusiles automáticos en ese país.
Las armas, municiones y pertrechos llegaron a República Dominicana y Haití procedentes de Miami, Estados Unidos, y en ambos casos no fueron declarados.
El Ministerio de Defensa dijo que el operativo, ejecutado por la Dirección de Inteligencia del Estado Mayor Conjunto de esa cartera, el J-2, el ministerio público y la Seguridad Aduanal del Puerto, permitió ocupar ocho fusiles M-16, un rifle calibre 22 y cientos de cápsulas de diferentes calibres, en el interior de un contenedor consignado a la empresa Sandy Cargo Express, SRL., procedente de Port Everglades, Miami, EE.UU.
Defensa dijo que las armas se encontraban camufladas en el interior de cuatro bases metálicas de carpas de jardín, para evitar ser detectados por las autoridades. El armamento “no tiene aparente uso y carecen de número de serie”, agregó la cartera.
Aduanas
La Dirección General de Aduanas (DGA) dijo por su lado que “una parte de los fusiles tenían piezas de recambios y otras no estaban completas. Las autoridades aduaneras continúan las investigaciones para ubicar la otra parte del cargamento”.
La DGA agregó que las armas fueron halladas en recipientes de lona y que el furgón en que fueron transportadas venía consignado a la empresa Sandy Cargo Express.
Aduanas señaló en su comunicado que en las últimas semanas ha incautado un gran número de armas de distintos calibres, municiones y otros pertrechos militares traídos en cajas y tanques de alimentos provenientes de las ciudades de Nueva York, New Jersey, Miami, Estados Unidos, y San Juan, Puerto Rico.
Las autoridades haitianas descubrieron el jueves de la semana pasada 150 fusiles automáticos y miles de municiones entre otros pertrechos militares, en la ciudad de Saint-Marc, 96 kilómetros al norte de la capital.
El cargamento fue hallado en el estacionamiento de la Aduana local, en un camión supuestamente cargado de “objetos usados” consignado a la de un importador identificado como Charles Durand.
Según el acta levantada a petición del director local de Aduanas, Víctor Hugo St-Louis, la carga, además del armamento, también incluía otros aditamentos militares como botas, cargadores, uniformes y chalecos tácticos.
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